Bajo un sol radiante (unos 23 grados), Hugo Lloris camina sobre el terreno de juego al final del partido con sus tres hijos, el más pequeño sobre sus hombros. El público, conquistado, animó a los negros y dorados de principio a fin, a empezar la temporada con una victoria, una primicia perfecta. Acogido por un magnífico tifo de piratas (“no nos podéis hundir”), saludado en voz alta por sus nuevos seguidores, Lloris se lanzó a embarcarse con autoridad en un nuevo capítulo de su carrera. En el minuto 3 salvó a LAFC con una atajada ante un potente disparo desde corta distancia de Jordan Morris.
El portero francés, de 37 años, fichó a principios de 2024 por el Los Angeles FC, franquicia derrotada en noviembre en la final del campeonato de 2023, tras doce años en el Tottenham de la Premier League. El ex capitán de los 'bleus', plusmarquista de selecciones de la selección francesa (145), espera encontrar "un soplo de aire fresco" en la MLS.
“Me esperaba cosas buenas, pero no tantas”, valoró Lloris. Estuvo muy abierto en ciertos momentos del partido, perdimos un poco el control del partido porque nos abrimos, quizás en Europa se controla más tácticamente. Pero lo compensa con generosidad, el aspecto atlético. Y hoy (sábado) había un ambiente magnífico que nos permitió mantener el resultado. Vine aquí sin prejuicios, respetando el campeonato. Si bien llevaba diez meses sin jugar y una salida por lesión en la Premier League, el ex jugador del Niza y del Lyon tranquilizó sobre su estado.
En un bonito estadio BMO, con vistas a las montañas de Ventura, Lloris, inconfundible con su indumentaria amarilla fluorescente y su número 1, hizo varias paradas y capturó los balones con confianza. “No estoy necesariamente contento con mi juego aéreo, trabajamos en ciertas cosas en los entrenamientos, hubo algunos malentendidos durante el partido, pero eso es normal. Físicamente todavía no estoy al 100%”, comentó.
Vio a su equipo abrir el marcador con una volea de Timothy Tillman (45º), luego pudo apreciar el “golazo” de su compañero polaco Mateusz Bogusz (55º), que encontró la esquina contraria tras un gancho a la entrada a la superficie. En el lado izquierdo.
Como el destino es travieso, Lloris se lanzó al lado equivocado y concedió un penalti ejecutado por el argentino Pedro de la Vega (73º). Suficiente para recordarle la no muy lejana final del Mundial de diciembre de 2022 en Qatar, perdida en los penaltis ante la Albiceleste de Lionel Messi. El público no se lo reprochó a su nuevo portero, que ya parece adoptado.
“Tenemos muchas expectativas, así es cuando se suma un jugador extranjero al equipo”, comentó a la AFP Damián Reyes (41), abonado desde hace tres temporadas. "Me impresionó, espero que se mantenga fuerte y consistente".
“Está tranquilo, no siente presión”, valoró su entrenador Steve Cherundolo. “Brinda soluciones en tiempo real a sus compañeros, se comunica, tiene buenos pases. Aporta su conocimiento, su experiencia, su calidad. Da seguridad a nuestra retaguardia, e incluso a todo el equipo. Vamos a aprovechar eso”. “Jugó un partido limpio, con paradas importantes. Su capacidad para tomar las decisiones correctas nos hará mucho mejores”, añadió el técnico.
