En Abiyán, en casa, Costa de Marfil aseguró su entrada en la Copa Africana de Naciones (CAN) contra Guinea-Bissau (2-0). El ex Lensois Seko Fofana lanzó idealmente a su equipo al inicio del partido (4º) antes de que Jean-Philippe Krasso duplicara la ventaja antes de la hora.
Tras una grandiosa y colorida ceremonia de inauguración en el estadio olímpico Alassane-Ouattara de Ebimpé, Costa de Marfil lanzó perfectamente “su” CAN. Muy esperado en el país, Seko Fofana iluminó la velada en el minuto 4 con un magnífico disparo rizado al borde del área. Un gol espléndido del ex capitán del RC Lens (1-0, 4), en su estilo característico, que permitió a los Elefantes aliviar la presión de todo un pueblo. Aturdidos pero valientes, los Lycaons de Guinea-Bissau reaccionaron rápidamente, a través de la lionesa Mama Baldé, peligrosa pero torpe dos veces delante de Yahia Fofana (8º, 30º). Temerosos de los contraataques contrarios, los marfileños de Jean-Louis Gasset mantuvieron el control del juego y presionaron después de la media hora para lograr el descanso. Seko Fofana, de nuevo, encontró el larguero con un casi copia y pega de su primer gol desde 18 metros (35º). Partiendo al frente del ataque, compensando la pérdida de Sébastien Haller, Jean-Philippe Krasso careció de precisión técnica para engañar a Djoco (37.º, 42.º). El último gesto es sólo lo que le faltó a Costa de Marfil para aumentar su merecida ventaja con un gol al descanso, al final de un animado primer acto.
Y tuvimos que esperar hasta la hora, o casi, para ver a Krasso realizar el movimiento solo esta vez. Después de un centro de Bamba mal sorteado por el defensa Sangante, el ex goleador del AS Saint-Étienne se ofreció con una magnífica secuencia de tres toques para derribar a Costa de Marfil (2-0, 58). Los hombres de Jean-Louis Gasset pudieron gestionar el final del partido como quisieron. Los recién llegados Karim Konaté y Nicolas Pépé todavía intentaron algunos tiros, imitados por Kessié en el contraataque (76º). Enfrente, Guinea-Bissau, con sus recursos nocturnos, nunca se habrá rendido. Mama Baldé, antes de salir lesionada, le dio caviar a Franculino, disgustada por la parada decisiva de Yahia Fofana (74º). Este partido inaugural de la 34ª edición de la CAN fue, en última instancia, una historia de Fofana: el héroe Seko, lógicamente, recibió el trofeo de mejor jugador del partido. Frente a su público incandescente, los Elefantes de Costa de Marfil entraron con éxito en esta 34ª edición de la CAN y se hicieron con el liderato del Grupo A, a la espera del Nigeria-Guinea Ecuatorial previsto para este domingo (15.00 horas). Dentro de cinco días, el país anfitrión se enfrentará a las Súper Águilas nigerianas en este mismo estadio olímpico de Abiyán, que celebrará este sábado por la noche.