Las autoridades de Malasia cancelaron el sábado un festival de música que duraba todo el fin de semana después de que el cantante y el bajista de una banda británica se besaran en el escenario para denunciar las leyes anti-LGBT de Malasia.
La banda británica de pop rock The 1975 tuvo que cancelar su concierto del viernes en el festival de música Good Vibes en Sepang, en las afueras de la capital, Kuala Lumpur, poco después de que el vocalista Matty Healy besara al bajista Ross MacDonald en el escenario.
La homosexualidad es ilegal en Malasia y puede llevar a la cárcel. Las personas LGBT son regularmente víctimas de discriminación por parte de las autoridades.
Anteriormente, durante su concierto, Matty Healy denunció con vehemencia las leyes anti-LGBT de Malasia y agregó que la banda había considerado retirarse del evento.
Este acto de protesta en el escenario no fue el primero para Healy, quien ya había besado a una fan durante un concierto de 2019 en los Emiratos Árabes Unidos, donde las leyes anti-LGBT también son muy estrictas.
El ministro de Comunicaciones y Digital de Indonesia, Fahmi Fadzil, prometió tomar medidas rápidas el sábado temprano, en una publicación sobre el beso, calificándolo de "muy grosero". Luego ordenó la "cancelación inmediata" del resto del festival de tres días después de reunirse con los organizadores.
“Nunca tocar las sensibilidades de nuestra comunidad, especialmente aquellas que van en contra de las formas y valores de la cultura local”, agregó en Twitter.
En un comunicado también publicado en Twitter, el festival confirmó que la cancelación había sido decidida por el Departamento de Comunicaciones "tras la conducta y los comentarios controvertidos del artista británico Matty Healy". "El ministerio ha enfatizado su firme postura contra cualquiera que desafíe, ridiculice o viole las leyes de Malasia", agregó el comunicado.
En mayo, las autoridades indonesias incautaron más de 100 relojes con los colores del arcoíris inspirados en el orgullo LGBT de las tiendas del relojero suizo Swatch. Desde entonces, esta empresa ha demandado al gobierno, reclamando daños y perjuicios y exigiendo la devolución de los relojes.
