Más de 6.000 personas se reunieron el sábado por la mañana para una fiesta rave en el aeropuerto de Quimper, a pesar de una orden de prohibición de la prefectura de Finistère, anunció esta última en un comunicado. Los fiesteros acudieron a primera hora del sábado a la plataforma del aeropuerto de Pluguffan, cerca de Quimper, cuya actividad comercial está interrumpida desde noviembre pasado.
"En estos momentos, la concentración en el aeropuerto de Pluguffan se estima en más de 6.000 personas (más de 2.000 vehículos)", indicó la prefectura, en un comunicado de prensa publicado el sábado a las 09:30.
Durante la noche del viernes al sábado, "varios vehículos fueron controlados en el sector de Châteaulin (Finisterre) permitiendo la incautación de 65 m³ de material tipo sistema de sonido, así como varios vehículos y un generador de gran capacidad", aclaró.
El miércoles, el prefecto de Finistère emitió una orden que prohíbe las reuniones festivas no declaradas de carácter musical durante el fin de semana de Pascua, citando "informaciones" sobre una posible "fiesta rave o tecknival" organizada "entre el 29 de marzo y el 2 de abril de 2024".
"Ante esta fiesta rave no autorizada, los servicios estatales están plenamente movilizados", indica la prefectura en su comunicado de prensa, añadiendo que en el lugar se desplegaron un equipo de bomberos y una treintena de gendarmes. “Se esperan refuerzos móviles”, se especifica.
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La prefectura de Finisterre subraya que la participación en esta fiesta rave “constituye un delito sancionado” y que “los participantes serán multados”. "Cualquiera que se una a la reunión se estaría colocando en una situación ilegal", añadió.
