Un ataque con drones reivindicado por Kiev tuvo como objetivo el martes una zona industrial en Tartaristán y dejó 13 personas heridas, dijeron las autoridades de esta república rusa situada a más de 1.000 kilómetros de Ucrania. Ucrania lleva a cabo regularmente ataques con drones o sabotajes contra fábricas, ferrocarriles o refinerías en territorio ruso, pero es raro que un ataque afecte a infraestructuras tan alejadas de la frontera. Una fuente del sector de defensa ucraniano, entrevistada por la AFP, afirmó que se trataba de "una operación del GUR", la inteligencia militar ucraniana, que en el pasado se atribuyó múltiples ataques de este tipo en suelo ruso.
“Esta mañana se llevó a cabo un ataque aéreo con drones contra fábricas de Tartaristán ubicadas en Yelabuga y Nizhnekamsk”, dijo en Telegram el servicio de prensa del líder de esta república central rusa, Rustam Minnikhanov. El ataque "no causó daños graves, el proceso tecnológico de las empresas no fue perturbado", aseguró el comunicado de prensa, sin especificar qué fábricas fueron el objetivo.
El Ministerio de Sanidad de Tartaristán, sin embargo, informó de 13 personas heridas por la explosión provocada por el dron: eran “estudiantes, entre ellos dos menores”. "Ocho personas fueron hospitalizadas por lesiones de gravedad leve o media, sus vidas no corren peligro", añadió en Telegram.
El portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, aseguró que el ejército ruso “se esfuerza por minimizar y luego eliminar por completo la amenaza” de ataques ucranianos en Rusia. Fue la zona económica especial (ZEE) de Alabouga, situada a unos diez kilómetros de la ciudad de Yelabuga, la que fue atacada alrededor de las 02:45 GMT del martes, según el servicio de prensa de la ZEE.
Esta zona cuenta con fábricas y empresas, especializadas en la producción de productos químicos, mecánicos y procesadores de metales. Según una fuente del sector de defensa ucraniano entrevistada por la AFP, el ataque tuvo como objetivo un lugar de montaje de drones. “Fue una operación del GUR, un ataque de drones ucranianos a una empresa que ensamblaba drones Shahed (explosivos, nota del editor). El lugar ha sufrido daños importantes”, afirmó esta fuente, sin precisar si el ataque se lanzó desde territorio ruso o ucraniano. El otro lugar objetivo, en Nizhnekamsk, es una importante refinería de petróleo. Según las autoridades locales, el dron fue neutralizado por un sistema de interferencia electrónico y su caída no provocó heridos ni daños.
Los ataques con aviones no tripulados dirigidos a emplazamientos energéticos rusos han aumentado en los últimos meses, provocando grandes incendios, especialmente en refinerías. Kiev había prometido llevar los combates a suelo ruso en represalia por los numerosos bombardeos en su territorio. Rusia intensificó sus ataques contra las redes energéticas ucranianas en la primavera, lo que provocó cortes de electricidad y racionamiento que afectaron a cientos de miles de civiles.
