La vicepresidenta de Estados Unidos, Kamala Harris, pidió este domingo 3 de marzo un alto el fuego inmediato en Gaza. También instó al Estado judío a aumentar el flujo de ayuda para aliviar a la población palestina, que vive una verdadera “catástrofe humanitaria” en condiciones “inhumanas”.
Los comentarios de Kamala Harris pidiendo a Israel que mejore las condiciones de vida en la Franja de Gaza se encuentran entre los más contundentes jamás realizados por un alto funcionario del gobierno estadounidense.
El vicepresidente, hablando en un evento en Selma, Alabama, para conmemorar el aniversario del Domingo Sangriento, instó a Hamás a aceptar un acuerdo sobre la liberación de rehenes que iniciaría un alto el fuego de seis semanas y permitiría que llegara más ayuda.
“El pueblo de Gaza está pasando hambre. Las condiciones son inhumanas y nuestra humanidad común nos obliga a actuar”, afirmó. “El gobierno israelí debe hacer más para aumentar significativamente el flujo de ayuda. No hay excusas”.
