“Ha manchado todo lo que soy”: la ex “reina de los influencers” Magali Berdah cuestionó duramente al rapero Booba, el lunes 27 de noviembre, ante el tribunal penal de París, donde 13 personas están siendo juzgadas por haber participado en el ciberacoso masivo. del que fue víctima.
Durante una tensa audiencia, Magali Berdah, con la voz a veces entrecortada por los sollozos, relató el calvario que sufrió desde mayo de 2022, cuando fue abrumada en las redes sociales con decenas de miles de mensajes insultantes y amenazas de muerte. "Estuve a punto de tirarme por la ventana", dijo.
“Muere”, “puta sucia”, “estafadora”, “mereces ser decapitada y apedreada”… Trece internautas comparecerán hasta el 5 de diciembre por su presunta participación en este acoso “de manada”. Sólo seis de ellos comparecieron ante el tribunal el lunes, algo que Magali Berdah deploró. “Ojalá estas personas se dieran cuenta de lo que hicieron”, observó.
En total, este procedimiento afecta a 28 acusados, 15 de los cuales deberán ser juzgados por hechos similares en dos juicios posteriores, a mediados de diciembre y luego a finales de enero. Entre los internautas implicados, algunos están siendo procesados por haber enviado más de 70 mensajes de odio u ofensivos, otros sólo uno.
La sombra de un acusado número 29, al que no le preocupa este juicio, se cernía sobre una parte importante de los debates: la del rapero Booba, que lanzó una cruzada en 2022 contra Magali Berdah y aquellos a quienes llama “influvoleurs” y acusa de múltiples estafas contra los internautas. Booba, cuyo verdadero nombre es Elie Yaffa, fue acusado a principios de octubre en este caso y puesto bajo supervisión judicial por acoso moral agravado en línea. Las investigaciones sobre él continúan.
Magali Berdah, de 42 años, directora comercial de la agencia de influencers Shauna Events, fue acusada por Booba de prácticas comerciales engañosas. Reproches que alimentaron un debate más amplio sobre el sector de los influencers, cuyo reglamento el Parlamento votó en junio.
En este debate, "me atribuyeron todas las estafas del mundo", "me hicieron pasar por un monstruo", se lamentó ante el tribunal, describió detalladamente el papel que, según ella, desempeñó Booba en la avalancha de insultos y amenazas que recibió. "Un día, transmitió un enlace a un grupo de Telegram donde la gente exigía que me decapitaran y quemaran viva, con mi dirección", dijo. “Hubiera preferido que me diera una paliza una vez y que me quedara callada” antes que sufrir semejante desbordamiento de odio “todos los días”.
Magali Berdah explicó que tuvo que mudarse dos veces, que su hija mayor no había ido a la escuela y que se había sentido particularmente sola durante la terrible experiencia que había pasado. “Ya nadie quería escucharme, ya no era audible. Perdí a las tres cuartas partes de mis amigos, porque en cuanto aparecen conmigo, los acosan.
