Una nueva revolución en el laboratorio del multiculturalismo. Según el nuevo reglamento publicado por la Cancillería, los 54.000 profesores de los “community colleges” californianos deben integrar una perspectiva “antirracista” en sus clases, informa Le Monde. Estos establecimientos universitarios, que en California suman 116, acogen a algo menos de dos millones de estudiantes.
Entre las nuevas normas y recomendaciones en materia de “diversidad, igualdad e inclusión” (DEI), los profesores deben “reconocer” en particular que “las identidades culturales y sociales son diversas, fluidas e interseccionales”. Estas concepciones están en gran medida “politizadas”, reaccionan muchos detractores, en un momento en que Estados Unidos está dividido por el wokismo y su lugar en las escuelas.
Según las regulaciones, se alienta a los profesores a desarrollar “un conocimiento de la interseccionalidad de las identidades sociales y los múltiples ejes de opresión que experimentan las personas de diferentes grupos raciales, étnicos y otros grupos minoritarios”. Al hacerlo, comprenderán los principios que rigen la “creación de estructuras de opresión y marginación”.
El glosario, que acompaña a la nueva normativa, también cree que todos los docentes deben ser conscientes de su propio racismo. Así, los docentes que declaren “no ser racistas” estarían en “negación”, estima el glosario. El funcionamiento de la educación por “méritos” se refiere, por su parte, al “privilegio blanco”. Se dice que el mérito está "enraizado en la ideología de la blancura" y apoya "desigualdades estructurales basadas en la raza".
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Pero en California, la verdadera cuna del multiculturalismo, estas tesis, en sí mismas, no perturban a las principales instituciones. Más que la ideología que desarrollan estos documentos, lo que preocupa a los profesores son las consecuencias concretas que podrían tener. El reglamento tiene como objetivo “integrar las habilidades y criterios de la DEIA en los procesos de evaluación de los empleados y revisión de la tenencia”, subraya el sitio web de la “comunidad universitaria” de California. Por tanto, la permanencia de los profesores dependerá en parte de su adhesión a estas tesis.
Por lo tanto, los profesores deberán demostrar su “competencia cultural, su autorreflexión y su progreso personal”, informan también nuestros colegas de Le Monde. Seis profesores, apoyados por la Fundación para los Derechos y la Expresión Individual (una asociación que lucha por los derechos individuales), decidieron presentar una denuncia. Según ellos, esta norma no respeta la primera enmienda de la Constitución estadounidense sobre la libertad de expresión. "El reglamento exige explícitamente que los profesores juren lealtad a puntos de vista ideológicos controvertidos", insiste la asociación, que pretende llevar el proceso legal hasta el final.
