Un camión, junto a aviones, en una pista. Una primicia, que generó revuelo en el Salón Aeronáutico de París. Con sus colores pop azul y morado, el semirremolque de Airbus se puede ver desde lejos. Y este es el objetivo que persigue el gigante aeronáutico europeo, que rompe los códigos para llamar la atención de los visitantes. "Situado en el corazón de la exposición estática, en medio de nuestros aviones y nuestros helicópteros, este camión es un lugar de encuentro e intercambio entre nuestros empleados y los visitantes a quienes les abrimos las puertas de nuestro universo y de nuestras profesiones", explica Thibault Le Guillou, director de marketing de empleo de Airbus en Francia.
Una vez desplegadas sus puertas, la máquina proyecta un espacio de 100m2 con su terraza, donde se organizan eventos e intercambios con reclutadores. “Nuestro objetivo es convertir el interés mostrado por los visitantes, en particular aquellos que buscan trabajo o se reconvierten, en solicitudes”, subraya Thibault Le Guillou. Se trata también de “suscitar vocaciones” entre el público joven.
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Esta original iniciativa forma parte de las acciones emprendidas por Airbus para atraer talento en un mercado laboral ajustado. El grupo planea contratar a 3.500 personas en Francia, incluidas 2.300 en su rama de aviones comerciales, y dar la bienvenida a 1.000 aprendices. Este objetivo forma parte de una campaña internacional, que cubre 13.000 contrataciones en todo el mundo. Estas contrataciones masivas tienen como objetivo asegurar las mayores tasas de producción iniciadas para el A320neo, el A220 y los A330neo y A350 de largo radio. ¡Airbus tiene más de 7230 aviones para producir en cartera de pedidos! Pero también para trabajar en los aviones libres de carbono del futuro.
A pesar de su posición como líder mundial en aviación comercial y una fuerte marca empleadora, Airbus lo ha visto: debe “llegar” a los candidatos potenciales. “Nos dirigimos a tres familias de profesiones para las que las dificultades de contratación son diferentes”, resume el responsable de marketing de empleo de Airbus.
Trabajos relacionados con la producción, primero. Se trata de puestos para agentes de fabricación, mecánicos, ingenieros electrónicos y especialistas en apoyo logístico. “En estas profesiones, la dificultad radica en el agotamiento de la reserva de candidatos calificados”, señala Thibault Le Guillou. Airbus, en colaboración con Pôle emploi y las agencias de trabajo temporal, organiza encuentros para embarcar, después de las pruebas de aptitud, a los solicitantes de empleo y personas en reciclaje en cursos de calificación. “En 2023, nuestra meta es capacitar a 800 empleados. No nos detenemos en el CV o diplomas. Lo que importa son las ganas y las habilidades”, insiste Thibault Le Guillou. Airbus también forma a jóvenes, a través de sus dos escuelas secundarias, con sede en Toulouse y Méaulte, desde el CAP hasta el bachillerato profesional, con, como bonificación, un diploma y, a menudo, una oferta de trabajo.
En las profesiones digitales -inteligencia artificial, ciberseguridad, software, analistas de datos-, que representan el 30% de las contrataciones previstas para 2023, el grupo compite con todos los demás sectores (distribución, automoción, cosmética, etc.). “Estas profesiones están bajo una presión muy alta debido al desajuste entre el volumen de ofertas de trabajo y el número de estudiantes y profesionales formados. Además, la fabricación a menudo no es el primer sector en el que piensan. Estamos en una competencia feroz con el sector digital”, explica Thibault Le Guillou. Por lo tanto, Airbus abrió este año su propia escuela para capacitarse en profesiones de ciberseguridad, en Toulouse, en asociación con la escuela Ynov, con una maestría.
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Finalmente, en las profesiones de ingeniería -en producción, oficinas de diseño, mantenimiento, atención al cliente...-, “no tenemos dificultad para atraer talento. Pero hay un desequilibrio entre la oferta y la cantidad de ingenieros capacitados”, dice Thibault Le Guillou. La escasez es evidente en profesiones emergentes como la ingeniería de hidrógeno, una habilidad que está en el corazón de la estrategia de Airbus con el programa de aviones Zero-e ("e" para emisiones contaminantes). Airbus también debe responder preguntas sobre sus compromisos concretos para descarbonizar sus aviones. “Venir a Airbus significa tener un impacto directo en la transición energética, al participar en el proyecto de aviones bajos en carbono”, señala el gerente de marketing de empleo de Airbus. Para el gigante europeo, el reto también es luchar contra la autocensura, en particular de las mujeres jóvenes, que piensan que no cumplen todos los criterios para trabajar en la aeronáutica. Y contra la idea generalizada de que Airbus solo contrata ingenieros.
