Un tribunal de Hong Kong ordenó el lunes la liquidación del gigante inmobiliario chino Evergrande, en dificultades, después de que no presentara un plan de reestructuración convincente, lo que provocó la caída de sus acciones en el mercado de valores de Hong Kong. Evergrande era el mayor promotor inmobiliario de China. Pero acumuló deudas hasta tener pasivos por más de 300 mil millones de dólares. Se ha convertido así en un símbolo de la crisis inmobiliaria que dura desde hace varios años en la segunda economía del mundo.
“(Considerando) la evidente falta de avances por parte de la empresa en la presentación de un plan de reestructuración viable. (...) Considero procedente que el tribunal dicte sentencia para liquidar la empresa, y eso es lo que ordeno”, declaró la jueza Linda Chan. La jueza debería presentar los detalles de su sentencia por la tarde y podría nombrar un síndico para Evergrande. Sin embargo, no está inmediatamente claro cómo una decisión tomada en la región semiautónoma china de Hong Kong puede materializarse en China continental, donde tiene su sede el grupo.
“La decisión judicial de hoy es contraria a nuestra intención original (...) Es extremadamente lamentable”, respondió el director general de Evergrande, Shawn Siu, al medio económico chino 21st Century Business Herald. Después de que se suspendiera la sesión de la mañana, Fergus Saurin, un abogado que representa a un grupo de acreedores, dijo a los periodistas que Evergrande no había “entablado un diálogo” con ellos. "Hubo intentos de diálogo en el último minuto que no condujeron a nada", afirmó. "La empresa sólo tiene la culpa de su liquidación".
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El año pasado, un acreedor presentó una petición de liquidación ante un tribunal de Hong Kong contra el grupo Evergrande. Pero el proceso se prolongó mientras las partes intentaban negociar un acuerdo. Tras el anuncio de la liquidación, las acciones de Evergrande cayeron más de un 20% en la Bolsa de Valores de Hong Kong, que suspendió la cotización de las acciones. "La negociación de valores de (...) Evergrande Property Services Group Limited se suspendió a las 10:19 a. m. hora local (02:19 GMT), dijo la Bolsa de Valores de Hong Kong. Este último también suspendió la cotización de la filial de vehículos eléctricos del grupo, Evergrande NEV.
El colapso de Evergrande, que incumplió sus pagos por primera vez en 2021 y que se declaró en quiebra en Estados Unidos, fue seguido de cerca por las autoridades chinas porque el grupo era un pilar de la economía china. El sector inmobiliario y de la construcción de China representó aproximadamente una cuarta parte del PIB de China. Durante décadas, las viviendas nuevas en China eran pagadas incluso antes de su construcción por los propietarios y los grupos financiaban fácilmente sus nuevos proyectos a crédito.
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Pero la enorme deuda del sector ha sido vista en los últimos años por quienes están en el poder como un riesgo importante para la economía y el sistema financiero del país. De este modo, Pekín ha ido endureciendo progresivamente las condiciones de acceso al crédito para los promotores inmobiliarios a partir de 2020, lo que ha secado las fuentes de financiación de los grupos ya endeudados. A finales de junio, Evergrande estimaba sus deudas en 328.000 millones de dólares. China ha anunciado varias veces medidas para salvar su sector inmobiliario, pero los resultados hasta ahora han tenido poco efecto.
En diciembre, las principales ciudades de China volvieron a registrar una caída intermensual en los precios inmobiliarios, según cifras oficiales. De las 70 ciudades que componen el indicador oficial de referencia, 62 estaban afectadas (frente a 33 en enero de 2023, un signo de deterioro de la situación). Los bancos chinos concedieron el año pasado cerca de 10.000 millones de yuanes (1.290 millones de euros) en préstamos al sector inmobiliario, según datos publicados la semana pasada.
