El cineasta francés Quentin Dupieux cree que ha llegado el momento de "cerrar la puerta" y por ello ha rechazado cualquier promoción antes del estreno de su película El segundo acto, que inaugurará el Festival de Cannes el 14 de mayo. El especialista en humor absurdo, director de Goma, Increíble pero cierto, Yannick o incluso ¡Daaaaaalí!, lo explica en una insólita nota a los periodistas.
Quentin Dupieux subraya que hasta ahora siempre se ha tomado el tiempo para promocionarse “como lo hacen casi todos los cineastas de este planeta”. “El ritmo de estrenos se ha acelerado considerablemente para mí y, sin darme cuenta, he acumulado un tiempo de conversación en los medios que probablemente sea mayor que la duración de mis 12 películas juntas. El colmo”, escribe este estajanovista de comedia loca y ultracorta, que ha realizado seis películas en los últimos cuatro años.
“Hoy (...) quiero quedarme callado. No por cansancio o por pretensión sino simplemente porque la película El segundo acto, muy locuaz, dice con palabras bien elegidas todo lo que quiero decir y contiene ya su propio análisis de forma clarísima”, argumenta. “Por tanto, en mi opinión, sería inútil escuchar a un director y a sus actores parafrasear una película en la que todo está siempre dicho y comentado en tiempo real. (...) Estamos realmente impacientes por leer sus críticas, comentarios o insultos”, añade, sin embargo. “Este texto es tan aburrido como la lluvia, pero la película en cuestión es mucho menos aburrida... Otra prueba sorprendente de que es hora de cerrar la persiana”, concluye.
A sus 49 años, Quentin Dupieux (alias Mr. Oizo en la música electrónica) se ha consolidado como una de las referencias francesas del humor absurdo, con 13 largometrajes en 17 años. Su universo atrae cada vez a más estrellas, desde Jean Dujardin hasta Alain Chabat, Benoît Poelvoorde, Adèle Exarchopoulos y Léa Drucker. El segundo acto (1h16), con Léa Seydoux, Vincent Lindon, Louis Garrel y Raphaël Quenard, se estrenará en las salas simultáneamente con su programación fuera de competición para inaugurar el 77º Festival de Cannes el 14 de mayo.
