Se vuelve complicado para los visitantes del templo de Angkor Wat. El antiguo aeropuerto estaba situado a la salida de Siem Reap, una popular ciudad turística de Camboya, sobre todo por su proximidad al templo, un sitio de visita obligada en el país. Pero, mientras Camboya cerraba sus fronteras debido a la epidemia de Covid, la primera piedra del nuevo aeropuerto se colocó en el pueblo de Ta Yek, en el distrito de Sotr Nikum, a más de cuarenta kilómetros de la ciudad imperial jemer de 'Angkor. El antiguo aeropuerto estaba ubicado a 5 kilómetros del templo. El nuevo se encuentra ahora a más de 50 kilómetros del centro de Siem Reap, popular entre viajeros de todo el mundo.
Para su construcción, las autoridades camboyanas no escatimaron en recursos, con un presupuesto de más de mil millones de dólares. El aeropuerto está clasificado como 4E y cuenta con una pista de 3.600 metros de largo y 45 metros de ancho, por lo que podrá recibir vuelos de larga distancia, incluidos B777 o A350; se esperan 16 compañías aéreas en la pista. Además, el aeropuerto contará con un total de 48 puertas para facilitar las operaciones de los pasajeros. Mucho mejor, porque ya prevemos 7 millones de viajeros en su primer año de funcionamiento y 30 millones en diez años, con un gradual ascenso.
La principal desventaja es, por supuesto, la distancia a Siem Reap, a la que se puede llegar en taxi, tuk-tuk o incluso a pie desde el antiguo aeropuerto. La nueva terminal se encuentra a varias decenas de kilómetros del templo, lo que necesariamente requerirá un presupuesto de transporte adicional y tiempo de viaje para visitar Angkor o simplemente pasar una noche en la ciudad. Espere 45 minutos en taxi para llegar a Siem Reap.
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Otro inconveniente es que actualmente no existe un plan preciso para el transporte público. La carretera del aeropuerto está casi terminada y el proyecto ferroviario aún está en estudio. Por el momento, alrededor de la enorme infraestructura, los equipos de construcción, las barreras y el acceso por carretera están prohibidos. Cuesta creer que todo estará listo para el 16 de octubre, pero "los trabajadores están trabajando día y noche", asegura un policía in situ. Es casi imposible fotografiar el lugar de la construcción y la prensa tiene que conformarse con dibujos de artistas proporcionados por la Secretaría de Aviación Civil.
Las ventajas son una capacidad de acogida sin precedentes en el país y unas infraestructuras modernas que lo hacen atractivo para el tan esperado desarrollo turístico y económico.
Sin embargo, a pesar de su relativa distancia del templo de Angkor Wat, a casi una hora en coche del lugar emblemático del país, el aeropuerto no canalizará el número de visitantes al icónico templo, en particular los de viajeros chinos, y algunos temen que esta enorme capacidad de acogida no obstaculice aún más las visitas a la ciudad imperial de Angkor y sus templos, ya saturados de viajeros, y de los que se quejan los lugareños, pero también los propios turistas,
En última instancia, la construcción de esta nueva estructura aeroportuaria respalda el deseo de Camboya de desarrollar su capacidad de recepción de turistas y alcanzar el nivel de su vecino tailandés.
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