Los países de la OTAN dijeron el jueves que estaban "profundamente preocupados por las actividades maliciosas" de Rusia "realizadas recientemente en el territorio de la Alianza", al tiempo que aseguraron que éstas "no los disuadirán de seguir apoyando a Ucrania".
En un comunicado, los aliados denunciaron “actividades estatales hostiles que afectan a Chequia, Estonia, Alemania, Letonia, Lituania, Polonia y el Reino Unido”.
"Los incidentes en cuestión se enmarcan en la intensificación de las actividades que Rusia está llevando a cabo en toda la zona euroatlántica, y en particular en el territorio de la Alianza, utilizando intermediarios". "Se trata de actos de sabotaje, actos de violencia, actividades cibernéticas, interrupciones electrónicas, campañas de desinformación y otras actividades híbridas", detallan, añadiendo que estas "actividades híbridas (...) constituyen una amenaza" para su seguridad.
"Actuaremos individual y colectivamente en respuesta a estas acciones y seguiremos consultando estrechamente", continúan. "Nos aseguraremos de que la Alianza y los Aliados estén preparados para proporcionar disuasión y defensa contra actividades o ataques híbridos". “Condenamos la actitud de Rusia y le pedimos que respete sus obligaciones internacionales, como lo hacen los Aliados. Las acciones de Rusia no nos disuadirán de seguir apoyando a Ucrania”, concluyen.
A finales de marzo, Praga reveló el descubrimiento por parte de los servicios de inteligencia checos de una red orquestada por Moscú que difundía propaganda prorrusa en Ucrania a través del sitio web Voz de Europa y que se sospechaba que había corrompido a eurodiputados. En el Reino Unido, las autoridades dijeron a finales de abril que un británico de 20 años había sido acusado en Londres en virtud de la ley de seguridad nacional por supuestamente organizar ataques contra “empresas vinculadas a Ucrania”.
El Ministro francés para Europa, Jean-Noël Barrot, indicó recientemente que Francia y otros países europeos fueron “golpeados por la propaganda rusa” en el período previo a las elecciones europeas, que tendrán lugar del 6 al 9 de junio en la UE.
