El presidente iraní, Ebrahim Raïssi, expresó la voluntad de su país de cooperar con el régimen militar que llegó al poder en Níger mediante un golpe de Estado a finales de julio, al recibir a su jefe de diplomacia en Teherán el miércoles 25 de octubre.
Durante una entrevista con Bakary Yaou Sangaré, nombrado por los generales nigerinos, el presidente Raïssi calificó “la resistencia del pueblo nigerino contra las políticas hegemónicas europeas” como “testimonio del rechazo africano al colonialismo”, según el sitio web de la presidencia iraní.
El régimen militar llegó al poder en Niamey el 26 de julio derrocando al presidente Mohamed Bazoum, antes de ordenar la salida de las tropas de Francia, antigua potencia colonial, estacionadas en el país. Raïssi le dijo a Sangaré que Irán estaba “dispuesto a cooperar con Níger”, particularmente “en áreas económicas”, según la presidencia. Níger está sufriendo fuertes sanciones económicas impuestas por la Comunidad Económica de los Estados de África Occidental (CEDEAO), mientras que muchos países occidentales han cortado su ayuda al desarrollo.
El 4 de septiembre, el presidente iraní, Ebrahim Raïssi, “elogió la resistencia de los países africanos frente al colonialismo y al terrorismo” al recibir a Olivia Rouamba, jefa de la diplomacia del gobierno de transición de Burkina Faso, país vecino de Níger. Tras un golpe de Estado en 2022, el gobierno de transición de Burkina Faso ha expresado su deseo de diversificar sus socios, acercándose en particular a Rusia, al igual que el vecino Mali. Al mismo tiempo, Irán pretende fortalecer su influencia en África, donde el presidente Raïssi visitó Kenia, Uganda y Zimbabwe en julio.
