Las inundaciones provocadas hace casi dos semanas en Libia por la tormenta Daniel dejaron más de 3.800 muertos, según un nuevo informe publicado el sábado por la noche por las autoridades del este de Libia.
Las inundaciones que devastaron la ciudad de Derna, en el este de Libia, dejaron al menos 3.845 muertos, según un nuevo balance provisional obtenido "esta tarde", anunció Mohamed Eljarh, portavoz de un comité encargado de las ayudas, formado por el Gobierno oriental.
Esta cifra, que según él sólo incluye los cuerpos enterrados y registrados por el Ministerio de Salud, “se espera que aumente cada día”, afirmó.
Dijo que los cuerpos enterrados apresuradamente por los residentes en los primeros días después del desastre siguen desaparecidos.
Según él, las autoridades están trabajando para identificar a las víctimas enterradas sin identificación, así como a los desaparecidos, cuyo número asciende a más de 10.000, según estimaciones de las autoridades y de las organizaciones humanitarias internacionales.
Pidió a los residentes que informen sobre los desaparecidos en dos oficinas creadas por el fiscal general en Derna.
Mientras tanto, continúa la búsqueda de cadáveres bajo los escombros o en el mar y, según Eljarh, siguen participando al menos nueve equipos extranjeros.
La tormenta Daniel azotó especialmente Derna, ciudad de 100.000 habitantes a orillas del Mediterráneo, provocando la rotura de dos presas aguas arriba y provocando una inundación de la magnitud de un tsunami, arrasando con todo lo que encontró a su paso.
Más de 43.000 personas han sido desplazadas por las inundaciones, según las últimas estadísticas de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM).
