Once niños ucranianos debían partir el lunes de Rusia hacia Ucrania para reunirse con sus familias, un nuevo traslado realizado con la mediación de Qatar. Estos niños, de entre 2 y 16 años, y sus familiares fueron recibidos el lunes en la embajada de Qatar en Moscú y llegarán a Ucrania el martes a través del territorio bielorruso, informaron periodistas de la AFP. Algunos niños de este grupo, dos de los cuales tienen cinco y seis años, padecen enfermedades crónicas y tienen necesidades médicas específicas. Según Moscú, un total de 59 niños ya han sido repatriados a Ucrania a través de este mecanismo.
Kiev acusa a Rusia de haber “deportado” a su territorio a miles de niños procedentes de las regiones que ocupa en Ucrania. Moscú, por su parte, asegura que trasladó a estos niños para garantizar su seguridad ante los combates y estar preparado para entregarlos a sus familiares en Ucrania si así lo solicitan. El año pasado, la Corte Penal Internacional emitió una orden de arresto contra Vladimir Putin y la comisionada rusa para la infancia, Maria Lvova-Belova, por "crímenes de guerra" relacionados con esta política. Una decisión que el Kremlin considera nula de pleno derecho.
"Qatar está trabajando estrechamente con sus homólogos rusos y ucranianos, logrando avances en la iniciativa de reunificación, pero también buscando formas de generar confianza en otras áreas", dijo Lolwah al-Khater, Ministro de Estado para la Cooperación Internacional de Qatar, en un comunicado de prensa. "Seguiremos mediando entre las dos partes durante el tiempo que sea necesario, con la esperanza de que esto pueda conducir a una reducción del conflicto", añadió.
Los diplomáticos qataríes acompañarán a los once niños ucranianos en su viaje a Ucrania. Entre ellos, Adelia, de 13 años, que deberá reunirse con su tía tras perder a su madre durante los combates en su pueblo de Mikhaïlovka, cerca de Melitopol, en el sureste de Ucrania, hoy ocupada por fuerzas rusas. Un niño de 4 años, que partió hacia Krasnoyarsk, en el este de Siberia, con su padre, ahora gravemente enfermo, fue recogido en Moscú por su madre ucraniana, que lo trajo de regreso a Kiev.
Un chico de 16 años que perdió a su familia durante la evacuación de la región de Lugansk, una ciudad ocupada en el este de Ucrania, regresa con su tía. Otro niño de 14 años cuya madre, miembro de las fuerzas armadas ucranianas, estuvo retenida por Rusia como prisionera de guerra durante varios meses en 2022, también podrá volver a verla.
