Le Figaro Burdeos
Un centenar de juerguistas se habían instalado en el bosque de la cuenca de Arcachon, en un solar situado entre los municipios girondeses de Salles y Lugos, para disfrutar de una fiesta rave la noche del sábado al domingo. Advertidos por un residente molesto por la contaminación acústica, los gendarmes de Gironda localizaron el lugar exacto de la okupación festiva sobrevolando la zona en un helicóptero.
Luego, las patrullas terrestres intervinieron rápidamente para sonar el fin de estas celebraciones ilícitas en el bosque. Una treintena de coches estaban estacionados en un sendero de la Defensa de los Bosques contra los Incendios (DFCI), un tramo diseñado para limitar la propagación del fuego y permitir a los bomberos circular mejor por el macizo en caso de tragedia. Uno de estos coches no estaba asegurado.
Las personas presentes en esta fiesta rave fueron evacuadas sin incidentes. En el lugar no se encontraron drogas ni alcohol, mientras que los juerguistas, que presuntamente consumían drogas, huyeron hacia el bosque, según la gendarmería de Gironda. Los equipos de sonido de esta “fiesta” fueron incautados.
