Un estadounidense fue condenado el lunes en Alemania a cadena perpetua por la violación y asesinato de una turista de su misma nacionalidad, cerca del castillo bávaro de Neuschwanstein, uno de los lugares más visitados del país. El tribunal de Kempten (sur) consideró la culpabilidad del acusado "particularmente grave", por lo que es muy poco probable que sea puesto en libertad después de quince años de prisión, como suele ocurrir con las condenas a cadena perpetua en Alemania. La defensa ha indicado que quiere apelar.
"La principal motivación del acusado era satisfacer sus necesidades sexuales", señaló el juez Christoph Schwiebacher al pronunciar su veredicto. "Filmó todo su ataque" para conservar las imágenes, añadió el magistrado, juzgando el proceso "particularmente repugnante". Los hechos se remontan al pasado mes de junio. El primer día del juicio, el 19 de febrero, Troy Philipp B., de 30 años en el momento del crimen, confesó haber agredido sexualmente y estrangulado con un cinturón a una turista estadounidense de 21 años. Lo habían sorprendido unos caminantes que creían que se trataba de un acto sexual consensuado y habían seguido adelante.
Luego, el acusado “arrojó a la víctima como una bolsa de basura al vacío”, describió el juez. La joven murió en el hospital a causa de las heridas. El acusado también admitió haber empujado al vacío al amigo de la víctima, entonces de 22 años, que había intentado impedir su ataque. Esta joven, también estadounidense, sobrevivió a su caída desde una altura total de unos 50 metros. Fue ella quien llamó por teléfono a los servicios de emergencia, mientras los dos amigos yacían en el suelo tras su caída. “Está traumatizada y tendrá que vivir con las consecuencias de este ataque por el resto de su vida”, continuó el magistrado.
Los dos amigos de origen asiático se encontraban de viaje por Europa que les llevó, antes de Alemania, a Italia y España. “El acusado aparentemente se siente atraído por mujeres de origen asiático”, señaló el juez. Los investigadores descubrieron en su casa películas pornográficas en las que mujeres de origen asiático eran atacadas y violadas.
La policía había detenido a Troy Philipp B., que había huido, no lejos del lugar del crimen situado encima del Marienbrücke, un puente famoso por su mirador. El asesino, originario del estado de Michigan, se había encontrado por casualidad con sus dos compatriotas durante una caminata cerca del castillo. No se conocían antes.
Los hechos tuvieron una resonancia particular, porque tuvieron lugar cerca del famoso Castillo de Neuschwanstein, en el sur de Alemania, que es uno de los lugares más turísticos del país. Construido en el siglo XIX por el rey Luis II de Baviera, este edificio, que domina un promontorio rocoso de 200 metros en medio de los árboles, parece sacado de un cuento de hadas, hasta el punto de que se dice que inspiró el Logotipo de los estudios Walt Disney.
