Vladimir Putin promulgó el miércoles una ley destinada a confiscar el dinero y los bienes de las personas declaradas culpables de haber difundido “informaciones falsas” sobre el ejército ruso, una nueva ilustración de la represión contra los críticos del Kremlin, dos años después del inicio de su asalto. en Ucrania. Moscú declaró ilegales las críticas al ejército poco después de lanzar su asalto a Ucrania el 24 de febrero de 2022.
El nuevo texto promulgado fue votado a finales de enero en la Duma, la cámara baja del Parlamento ruso, y luego, a principios de febrero, por el Consejo de la Federación, la cámara alta. El miércoles, como era de esperar, las autoridades rusas publicaron el decreto presidencial firmado por Vladimir Putin.
Durante su presentación, el presidente de la Duma, Viacheslav Volodin, estimó que esta ley contra los "matones" permitiría "castigar a los traidores" que "actúan contra su país". De hecho, la ley no prevé confiscar absolutamente todos los bienes de una persona condenada, sino confiscar su dinero y fondos "utilizados o destinados" a financiar actividades "criminales", términos que, sin embargo, siguen siendo muy vagos.
El texto también prevé autorizar a los tribunales a retirar todas las distinciones honoríficas estatales a las personas condenadas por “información falsa”. El cargo de difundir “información falsa” sobre el ejército ruso conlleva una pena máxima de prisión de 15 años. Varios cientos de rusos comunes y corrientes han sido condenados en virtud de este artículo del Código Penal durante casi dos años.
