Sesenta y cuatro cadáveres fueron encontrados a lo largo de un tramo de carretera en las remotas tierras altas de Papúa Nueva Guinea en un ataque que parece vinculado al conflicto tribal, dijo la policía el lunes. El jefe de policía de Papúa Nueva Guinea, David Manning, dijo que se estaban llevando a cabo "operaciones específicas" para restablecer la "ley y el orden". Se ha desplegado personal adicional, dijo Manning, añadiendo que "se les han dado instrucciones claras para utilizar todos los medios necesarios para evitar más violencia y represalias", dijo.
Los hechos tuvieron lugar antes del amanecer del domingo cerca de la localidad de Wabag (norte), en las tierras altas a unos 600 kilómetros al noroeste de la capital, Port Moresby, según Manning. Las víctimas probablemente eran combatientes tribales que fueron emboscados por un grupo rival antes del amanecer del domingo, según las autoridades.
"Creemos que todavía hay cadáveres en el monte", añadió el subcomisario de policía Samson Kua. La policía recibió vídeos y fotografías que supuestamente procedían de los lugares donde se produjo esta violencia. Muestran imágenes de cuerpos ensangrentados con heridas graves, tendidos uno al lado del otro al costado de la carretera o apilados en la parte trasera de un camión.
En esta parte de la isla se han producido durante siglos enfrentamientos tribales, a menudo provocados por disputas territoriales y acusaciones de robo. La afluencia de armas automáticas ha hecho que los enfrentamientos sean más mortíferos e intensificado la violencia. Kua dijo que los tiradores utilizaron un verdadero arsenal, incluidos rifles SLR, AK-47, M4, AR15 y M16, así como escopetas y armas de fuego caseras. Parece que los combates continúan en una zona rural situada cerca de donde se produjo la violencia.
