Hungría no entregará al presidente ruso Vladimir Putin a la Corte Penal Internacional si ingresa a su territorio por falta de una base legal, dijo el jueves 23 de marzo el jefe de gabinete del primer ministro Viktor Orban.
Este país ha firmado el Estatuto de Roma, tratado internacional que creó la CPI en 1999, ratificado dos años después, durante el primer mandato de Viktor Orban.
Pero "no tenemos las leyes necesarias para arrestar al presidente ruso" porque, hoy, el texto "sería contrario a la Constitución" si se transpusiera a la ley nacional, explicó Gergely Gulyas a los periodistas en Budapest, sin más detalles.
Vladimir Putin está acusado de crímenes de guerra por la deportación de niños ucranianos. Esta orden de arresto, emitida el viernes por la CPI, va "en la dirección de la escalada más que en la dirección de la paz", martilleó Gergely Gulyas, calificándola de "lamentable". Ni Estados Unidos ni Rusia, que rechaza las acusaciones de crímenes de guerra, reconocen la jurisdicción de la CPI, recordó también.
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Según el fiscal de esta jurisdicción, Karim Khan, Vladimir Putin es susceptible de ser arrestado si viaja a uno de los 123 países que son parte del Estatuto de Roma, ya que los estados miembros de la CPI están obligados a ejecutar las órdenes de detención. Sin embargo, el presidente de la CPI, Piotr Hofmanski, reconoció que la ejecución de las órdenes “depende de la cooperación internacional”.
En el pasado, el ex líder sudanés Omar al Bashir viajó a varios estados miembros a pesar de una orden de arresto. Viktor Orban ha recibido fuertes críticas de sus socios en la UE al negarse a enviar armas a Ucrania y al criticar las sanciones contra Rusia.
