“Es abominable lo que está pasando en el Mediterráneo”, juzgó Jean-Luc Mélenchon el domingo 18 de junio tras el naufragio de un barco de migrantes, al considerar que hay que revisar los acuerdos de Dublín, y distribuir a los migrantes “por autoridad” en distintos países europeos. "Lo que está pasando en el Mediterráneo es abominable, el comportamiento de las autoridades griegas es atroz", declaró el líder de France Insoumise en BFMTV tras el hundimiento de un barco con cientos de inmigrantes frente a las costas de Grecia, que dejó al menos 78 muertos. .
Para Jean-Luc Mélenchon, es necesario revisar los acuerdos de Dublín, que dejan la atención de los solicitantes de asilo a los países de primera llegada a la UE. "Con los acuerdos de Dublín, donde llegas, te quedas es inaceptable", dijo.
Para Jean-Luc Mélenchon, “lo que decidió la Unión Europea” durante un reciente acuerdo entre Estados miembros que aún debe negociarse con el Parlamento, “es una vergüenza”. Según él, los migrantes deben ser “autoritariamente distribuidos” en los países europeos. ¿Qué pasa si algunos países no quieren? “La cuestión no es si quieren o no, sino si es necesario o no. De lo contrario, ¿de qué sirve ser la Unión Europea?”, responde.
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El acuerdo alcanzado el jueves entre los ministros del Interior de la UE prevé, en particular, que los Estados miembros estén obligados a recibir a un determinado número de solicitantes de asilo que hayan llegado a un país de la UE sujeto a presión migratoria (en función de su población y de su PIB per cápita), o en defecto de aportación económica, de 20.000 euros por solicitante de asilo no reubicado.
Para Jean-Luc Mélenchon, “no es una sanción. Si das 20.000 euros, te deshaces. Eso quiere decir que los que tienen dinero para pagar el hecho de que no quieren inmigrantes”, pagarán, lamenta. También juzgó como una “abominación”, el hecho “de que decidiéramos deportar a terceros países seguros”. “Vamos a montar campamentos en los países del otro lado del Mediterráneo”, denunció, “y empieza por los que no pueden decir no como Túnez, que está cogido por el cuello por el FMI” (Fondo Monetario Internacional ) por su situación económica, lamentó.
