Le Figaro Burdeos
La mayoría de los gendarmes visten uniformes, pero otros caminan a cuatro patas y están cubiertos de pelo. Se trata de perros, muchos de los cuales apoyan a las fuerzas del orden en sus diversas misiones. El viernes 17 de noviembre, Gaya, un pastor belga malinois, encontró a un nonagenario perdido en el tiempo en Dordoña. Ya es la tercera vez este año que logra encontrar el rastro de una persona desaparecida en la región.
Durante una desaparición preocupante, y más aún cuando cae temprano la noche, las primeras horas son fundamentales en la búsqueda, recuerda la gendarmería. Por eso es especialmente importante la ayuda de equipos de perros. En mayo de 2023, otro nonagenario fue encontrado en Gironda gracias a Gaya. Estaba helado y no podía levantarse después de una fuerte caída. En octubre, fue en las Landas donde Gaya encontró a una anciana cuya familia estaba preocupada por no verla en casa.
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Por supuesto, Gaya está emparejada con un adiestrador de perros, y ambos se han beneficiado de una formación especializada e intensiva en el centro de adiestramiento canino de la Gendarmería Nacional (CNICG) en Gramat (Lot). Gaya y su amo se incorporaron a la gendarmería de Gironda en julio de 2019, en el pelotón de vigilancia e intervención de Bouliac. Desde entonces, se han encontrado una docena de personas gracias a este pastor belga malinois.
Todos los equipos caninos están especializados, “ya sea en la búsqueda de personas, defensa, búsqueda de avalanchas, asalto, guardias, patrullas, búsqueda de restos humanos, armas y municiones, explosivos, narcóticos o aceleradores de fuego”, explica la gendarmería de Gironda. Valiosas habilidades en el campo, como lo ha demostrado Gaya desde su llegada al departamento.
