Cuatro personas murieron y decenas más desaparecieron después de que las fuertes lluvias azotaran el suroeste de China la semana pasada, informaron los medios estatales el miércoles (30 de agosto).
El miércoles, la emisora estatal CCTV dijo que las tormentas provocaron grandes inundaciones que incluyeron la inundación de una planta de procesamiento de acero, donde trabajaban más de 200 personas. "Por ahora, cuatro personas han muerto en las inundaciones y otras 48 están desaparecidas", según el canal CCTV, que precisó que las operaciones de rescate aún continúan.
El 21 de agosto, fuertes lluvias cayeron sobre Jinyang, un condado montañoso en la provincia de Sichuan, pero no se había comunicado el número de daños. Cinco personas fueron detenidas bajo sospecha de "no informar o informar falsamente de un incidente de seguridad", según la misma fuente. El presidente Xi Jinping ordenó a las autoridades "hacer todo lo que esté a su alcance para buscar a las personas desaparecidas (...) y consolar a sus familias", informó el canal.
El incidente "debe ser investigado a fondo y los responsables deben ser tratados conforme a la ley", dijo Xi Jinping según CCTV. China ha experimentado varios fenómenos meteorológicos extremos en los últimos meses. Eventos que, según los científicos, serán cada vez más frecuentes debido al cambio climático. En julio, al menos 78 personas murieron en una violenta tormenta y grandes inundaciones que azotaron el norte del país tras el paso del tifón Doksuri.
