La policía brasileña allanó este miércoles la casa del expresidente Jair Bolsonaro como parte de una investigación sobre la supuesta falsificación de certificados de vacunación contra el Covid-19, según varios medios locales.
La Policía Federal (PF) explicó en un comunicado de prensa que había realizado un total de 16 allanamientos, en Río de Janeiro y Brasilia, dirigidos a “una red criminal” sospechosa de “insertar datos falsos de vacunación de Covid en los sistemas públicos de salud”. pero sin citar a Jair Bolsonaro por su nombre.
Los certificados de vacunación falsos fueron "utilizados para eludir las restricciones sanitarias impuestas por las autoridades públicas de Brasil y Estados Unidos", también se puede leer en el comunicado de prensa.
Consultada por AFP, la PF no confirmó de inmediato si el expresidente de extrema derecha (2019-2022) estaba en el punto de mira de la operación policial. Según los medios, Mauro Cid, exayudante de campo de Jair Bolsonaro durante su presidencia, fue detenido como parte de la operación policial.
Un fotógrafo de la AFP vio salir un auto de la Policía Federal de la urbanización clausurada donde vive Jair Bolsonaro en Brasilia, sin poder identificar a los ocupantes del vehículo. Según varios medios brasileños, los teléfonos móviles del exjefe de Estado y su esposa Michelle fueron incautados.
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Durante su mandato, Jair Bolsonaro siguió criticando las vacunas anti-Covid, asegurando en varias ocasiones que no tenía intención de inmunizarse, mientras la pandemia mató a más de 700.000 personas en Brasil. Derrotado en las elecciones presidenciales de octubre, pasó tres meses en Estados Unidos y abandonó Brasil dos días antes de la toma de posesión de su sucesor de izquierda, Luiz Inacio Lula da Silva.
El certificado de vacunación seguía siendo obligatorio para entrar a Estados Unidos durante esta estancia. El gobierno de Estados Unidos anunció el lunes que esta obligación se levantaría a partir del 11 de mayo. Desde su regreso a Brasil a fines de marzo, Jair Bolsonaro ha sido entrevistado dos veces por la Policía Federal.
La primera audiencia tuvo lugar el 5 de abril, en el caso de las joyas ofrecidas por Arabia Saudita que ingresaron ilegalmente a Brasil, y la segunda la semana pasada como parte de una investigación sobre su presunto papel en los disturbios del 8 de enero en Brasilia, cuando los lugares de poder fueron saqueados por personas que se negaron a aceptar la elección de Lula.
