El presidente ruso, Vladimir Putin, garantizó el lunes que Moscú reemplazaría el grano ucraniano con destino a África, luego de que el Kremlin abandonara un acuerdo de granos crucial para la alimentación mundial y antes de una cumbre Rusia-África. “Quiero asegurar que nuestro país puede reemplazar los cereales ucranianos de manera comercial y sin costo alguno, especialmente porque esperamos otra cosecha récord este año”, escribió el jefe de Estado en un artículo publicado en el sitio web del Kremlin, titulado “Rusia y África: uniendo esfuerzos por la paz, el progreso y un futuro próspero”. "A pesar de las sanciones, Rusia continuará con sus vigorosos esfuerzos para garantizar la distribución de cereales, productos alimenticios, fertilizantes y otros bienes a África (...) se ampliará la red de embajadas y misiones comerciales rusas en África", agregó Vladimir Putin, mientras se inaugura una cumbre Rusia-África el jueves en la ciudad rusa de San Petersburgo.
Firmado en julio de 2022 en Estambul y renovado dos veces, el acuerdo de cereales, que permitió reabrir las exportaciones agrícolas ucranianas por mar a pesar de la ofensiva rusa, expiró la semana pasada. En un año, ha permitido que casi 33 millones de toneladas de cereales salgan de los puertos de Ucrania, principalmente maíz y trigo, lo que ha ayudado a estabilizar los precios mundiales de los alimentos y a evitar el riesgo de escasez. Moscú se ha negado a extenderlo, quejándose de entregas insuficientes de granos a los países pobres y de impedimentos a sus propias exportaciones de productos agrícolas y fertilizantes.
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El martes, la Unión Africana "lamentó" la retirada de Rusia del acuerdo. “Insto a las partes interesadas a resolver los problemas para permitir la reanudación del paso continuo y seguro de granos y fertilizantes de Ucrania y Rusia a las regiones necesitadas, incluida África”, dijo el presidente de la Comisión de la UA, Moussa Faki Mahamat, en su cuenta de Twitter. Moscú dijo el viernes que entendía "las preocupaciones" de los países africanos y prometió continuar entregando a los países necesitados. Rusia también dijo la semana pasada que consideraría los barcos con destino a Ucrania en el Mar Negro como potencialmente portadores de carga militar.
