Engie da un paso más en el despliegue de sus actividades al otro lado del Atlántico. La energética anuncia la adquisición de Broad Reach Power, una joven empresa especializada en almacenamiento en baterías. Engie se hace con el 100% del capital de la empresa, anteriormente en manos de dos fondos de inversión estadounidenses, Apollo y EnCap, por un valor empresarial de 1.600 millones de dólares. “La flexibilidad que proporcionan las baterías es fundamental para el desarrollo de las energías renovables. La flexibilidad es la capacidad de almacenar electricidad cuando se produce para reinyectarla a la red cuando los consumidores la necesiten. También es una herramienta de optimización de precios para los productores”, explica Sébastien Arbola, director general adjunto a cargo de Fex Gen y las actividades minoristas de Engie.
Broad Reach Power es una empresa joven, creada en 2019, que emplea a unas cincuenta personas, entre ellas especialistas en operaciones de mercado. Habilidades esenciales para optimizar el uso de baterías según los cambios en los precios del mercado y los “nodos del mercado”. Sin embargo, el mercado eléctrico no está unificado. Incluso dentro de un estado como Texas (un poco más grande que Francia) puede haber diferentes precios en un momento dado. Por tanto, un operador tiene todo el interés en comercializar su electricidad allí donde sea más cara. Lo que Broad Reach Power permitirá hacer a Engie a mayor escala, optimizando la producción y venta de electricidad de sus propios parques eólicos y solares estadounidenses. De hecho, las dos empresas están presentes en las mismas geografías: en Texas y, en menor medida, en California. Broad Reach Power tiene 350 MW ya en funcionamiento en Texas y California y 880 MW están en construcción y estarán en funcionamiento a finales del próximo año. Finalmente, 1.700 MW se encuentran en “desarrollo avanzado” para su puesta en servicio en 2025/2026. Por su parte, Engie ya cuenta con 6.200 MW de capacidad de producción de energía solar y fotovoltaica en Estados Unidos, en operación o en construcción.
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“Esta es una compra muy importante para los próximos años. Las baterías permiten transformar en un activo las perturbaciones del mercado relacionadas con el cambio climático o los problemas con los competidores”, resume Sébastien Arbola. Durante los períodos de intensa luz solar, los precios de la electricidad solar pueden ser negativos. Este fue el caso de los Países Bajos en junio, con precios que cayeron a -200 euros por megavatio hora. ¡Un escenario así permitiría, por tanto, pagar a los operadores con baterías para que las carguen! Tanto las olas de calor como las olas de frío extremo hacen necesario el almacenamiento en zonas donde las energías renovables ya están bien establecidas. Es el caso de California, Texas y también Australia, Italia o Reino Unido. El caso francés es algo diferente. Con sus centrales nucleares, pero también de gas y sus presas hidráulicas, el país tiene mucha más flexibilidad en la producción de su electricidad, lo que hace menos relevante el desarrollo de grandes unidades de almacenamiento en baterías.
