Una misión de la ONU llegó este domingo 1 de octubre a Nagorno Karabaj, por primera vez en tres décadas, anunció Azerbaiyán en un momento en que la mayoría de la población armenia local abandonó el enclave tras su reconquista por Bakú. La principal tarea de la misión será evaluar las necesidades humanitarias en el lugar.
Anteriormente, la ONU anunció que había recibido luz verde para enviar una misión al territorio este fin de semana. El sábado, Francia lamentó que Azerbaiyán sólo aceptara esta misión después del éxodo masivo de armenios.
Los separatistas armenios, que controlaron Nagorno Karabaj durante tres décadas, capitularon y acordaron deponer las armas la semana pasada, tras una ofensiva relámpago de Azerbaiyán. En total, se han reportado cerca de 600 muertes a raíz de esta ofensiva. Los combates en sí mataron a unos 200 soldados de cada bando.
Desde entonces, el enclave ha quedado casi completamente abandonado por sus habitantes, y más de 100.000 refugiados -de los 120.000 habitantes que viven oficialmente allí- han huido a Armenia por temor a represalias de Azerbaiyán.
“Todavía hay unos cientos de funcionarios, trabajadores de emergencia y personas con necesidades especiales que también se están preparando para irse”, escribió el ex defensor del pueblo de Nagorno Karabaj, Artak Beglarian, en X (ex Twitter).
En su huida por la única carretera montañosa que une el territorio con Armenia, al menos 170 personas murieron también el lunes en la explosión de un depósito de combustible, que dejó además 349 heridos, la mayoría de ellos con quemaduras graves. Según el gobierno armenio, más de 45.516 personas se encuentran actualmente en alojamiento proporcionado por el Estado.
