Un guineano de 17 años fue condenado el jueves 17 de agosto a 18 meses de prisión por el tribunal de menores de Roanne (Loira) por la agresión sexual a una niña de seis años, un caso que había tenido repercusión mediática tras la expedición punitiva del padre de la víctima.
La agresión sexual tuvo lugar en el contexto de un intento de robo en la casa de los padres de la niña, en octubre de 2022. El sospechoso, un menor no acompañado que llegó a Francia poco antes del incidente, admitió durante la audiencia a puerta cerrada "haber tocado las bragas de la niña, según lo confirma un análisis de ADN”, mientras dormía, explicó su abogada Me Camille Thinon.
El padre de la víctima había puesto vigilancia tras el ataque y había detenido al presunto agresor con ayuda de los vecinos. Luego atacó al sospechoso, una golpiza por la que fue condenado en marzo a ocho meses de prisión condicional. Este repartidor de 28 años fue el único de los cuatro imputados en reconocer los golpes propinados al adolescente con un palo y un cable eléctrico, que le provocaron una ITT (incapacidad laboral total) de diez días.
En los días posteriores al atentado y la expedición punitiva, el caso alimentó debates en el mundo político y mediático sobre el derecho a tomar la justicia por mano propia. Juzgado junto al padre de la víctima por haberle echado una mano, un vecino había sido condenado a seis meses de pena firme.
“La justicia ha manejado este caso con serenidad a pesar de su impacto mediático y social”, dijo el jueves a la AFP el fiscal de Roanne, Abdelkrim Grini.
Para el agresor, además de la pena de prisión, "la sentencia prevé tres años de seguimiento sociojudicial", indicó la abogada a la AFP, precisando que su defendida fue puesta bajo orden de depósito al final de la audiencia. . Este menor aislado ya había cumplido cuatro meses en prisión preventiva, antes de ser internado en un centro educativo cerrado, según el abogado que no descarta apelar su condena.
