Mientras los líderes jordanos y egipcios advierten contra una transferencia de palestinos a sus países, decenas de miles de personas se manifestaron en todo Medio Oriente el viernes en apoyo a los palestinos.
En Jordania, país vecino de Israel que ha hecho las paces con el Estado judío, más de 10.000 personas se reunieron en el centro de Ammán, cerca de la Gran Mezquita Hussein, ante la convocatoria de los Hermanos Musulmanes jordanos y de varios grupos de izquierda y jóvenes. . El viernes por la mañana, vehículos de un convoy intentaron acercarse a la frontera con Israel, antes de ser disuadidos por las fuerzas de seguridad. Habitado en más de su mitad por palestinos, refugiados de anteriores guerras árabes-israelíes, el reino hachemita teme un nuevo éxodo de palestinos, en caso de un grave deterioro de la situación en la Cisjordania ocupada. “La crisis no debería extenderse a los países vecinos y agravar la cuestión de los refugiados”, advirtió el rey Abdalá II, que recibió el viernes al jefe de la diplomacia estadounidense, Antony Blinken. El monarca advirtió contra “cualquier intento de desplazar a los palestinos de todas las tierras palestinas o provocar su desplazamiento”, según un comunicado del palacio real.
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En Bagdad, decenas de miles de iraquíes se reunieron en la plaza Tahrir para corear “¡No a la ocupación! ¡No a Estados Unidos! Reunidos ante el llamado del líder chiita Moqtada al-Sadr y blandiendo banderas palestinas e iraquíes, pisotearon y quemaron banderas israelíes.
En Egipto, videos en las redes sociales mostraban a cientos de manifestantes cantando solidaridad con Gaza en la mezquita de al-Azhar. "Los países árabes y musulmanes tienen el deber y la responsabilidad de proporcionar urgentemente ayuda humanitaria y socorro a los palestinos en Gaza", dijo la Universidad al-Azhar, la máxima institución del Islam sunita.
En Beirut, más de mil personas expresaron su solidaridad con los palestinos durante una manifestación organizada en los suburbios del sur de la capital, bastión de Hezbolá, aliado de Irán.
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En Teherán y varias otras ciudades iraníes, los manifestantes ondearon banderas iraníes, palestinas y de Hezbolá, sosteniendo pancartas que decían: “Abajo Estados Unidos” y “Abajo Israel”. También hubo miles de ellos saliendo a las calles en Argel.
En Arabia Saudita, donde las manifestaciones están prohibidas, un periodista de la AFP vio a un policía esposando a un fiel que había interrumpido las oraciones del viernes gritando al imán: “¡Habla de Palestina! ¡Gaza está bajo bombas!” Este lugar “no está hecho para la política”, respondió el imán antes de que arrestaran al hombre. Escena radicalmente diferente en la Gran Mezquita de La Meca, donde las redes sociales informan de un sermón del imán pidiendo “la liberación de la mezquita de al-Aqsa” en Jerusalén. La prueba de que el acercamiento a Israel, iniciado en los últimos meses por Riad, está teniendo dificultades para aprobarse entre algunos sauditas, apegados a la causa palestina.
