Ecuador declaró este sábado estado de emergencia en Guayaquil, el principal puerto del país, así como en otras dos provincias afectadas por la violencia vinculada al narcotráfico. La zona en cuestión comprende la ciudad de Guayaquil y las dos localidades periféricas de Durán y Samborondón, así como las provincias occidentales de Santa Elena y Los Ríos, anunció el presidente Guillermo Lasso en un discurso transmitido por radio y televisión.
El presidente no precisó la duración del estado de emergencia, que entrará en vigor el domingo e incluirá un toque de queda entre la 1 y las 5 de la mañana hora local (06:00 y 10:00 GMT). La constitución le permite al presidente declarar un estado de emergencia y llamar al ejército cuando el país se enfrenta a graves disturbios internos.
“Tenemos un enemigo común: la delincuencia, el narcotráfico y el crimen organizado”, martilleó el mandatario derechista, de 67 años.
En 2022 ya se ha declarado tres veces el estado de emergencia en Guayaquil. La provincia costera de Esmeraldas (noroeste), que limita con Colombia y es una de las zonas más afectadas por la delincuencia y el narcotráfico, también lleva 60 días bajo estado de emergencia desde principios de marzo.
Ubicado entre Colombia y Perú, los principales productores de cocaína del mundo, Ecuador incautó un récord anual de 210 toneladas de drogas en 2021, en su mayoría cocaína, con destino a puertos europeos. En 2022, las incautaciones superaron las 200 toneladas de droga y el gobierno declaró la guerra a los traficantes, que defienden ferozmente las rutas de la droga. Al mismo tiempo, la tasa de homicidios casi se duplicó. Entre 2021 y 2022 pasó de 14 a 25 por cada 100.000 habitantes, según las autoridades.
Guillermo Lasso también anunció el sábado que modificó un decreto para autorizar "la tenencia y portación de armas de uso civil para la defensa personal" y el uso de gas pimienta. “Como a ti, me preocupa la inseguridad. Para el gobierno ecuatoriano su paz y tranquilidad son vitales”, dijo el mandatario, quien impulsa una “cruzada por la seguridad” combinando el accionar de las fuerzas militares y policiales. También indicó que se prohibió la fabricación, registro y tenencia de armas caseras.
Las autoridades identificaron a 15 jefes del crimen organizado como "objetivos de alto valor", seis de los cuales ya fueron capturados, según el jefe de Estado. “Combatiremos a los delincuentes con todo el peso de la ley porque nuestra prioridad es su tranquilidad”, concluyó Guillermo Lasso, quien es objeto de un juicio político por parte de la opositora Asamblea Nacional por presuntas irregularidades.
