Le Figaro Burdeos
Su vida ya no corre peligro, pero está gravemente herido. Mientras intervenía para apagar un incendio en una residencia situada cerca de la plaza de los Bosquets en Mérignac (localidad fronteriza con Burdeos), un bombero cayó el sábado desde el cuarto piso. Según el alcalde de la localidad, Alain Anziani, “la barandilla de una ventana se derritió bajo sus pies”.
Apoyado por sus compañeros y trasladado al hospital universitario de Burdeos, el bombero se encontraba “en estado de emergencia absoluta”, según la prefectura. Varios políticos, entre ellos el alcalde de Mérignac, el prefecto de Gironda Étienne Guyot y el ministro del Interior, Gérald Darmanin, expresaron su apoyo a su familia y a sus colegas, esperando su pronta recuperación.
La ciudad había emitido una orden de peligro para evacuar a los residentes que vivían en el edificio dañado como medida de precaución. A excepción de los residentes de dos apartamentos, el domingo regresaron a sus casas después de las primeras evaluaciones.