Unas 15 toneladas de una mezcla de alquitrán y agua fueron vertidas en un arroyo cerca de Baraqueville, en Aveyron, generando una contaminación que actualmente está siendo analizada por la Oficina Francesa de Biodiversidad (OFB), según supo el viernes 1 de septiembre en la prefectura.
“El vertido se produjo el martes alrededor de las 19.00 horas y se trata de un volumen derramado de unas 15 toneladas. El producto en cuestión está compuesto aproximadamente por un 65% de betún y un 35% de agua y se solidifica en frío”, indicó la prefectura a la AFP.
Este vertido "parece estar relacionado con un error de manipulación (válvulas mal cerradas) de un camión cisterna durante la entrega de un producto bituminoso" a una empresa, según la misma fuente. El miércoles, dos inspectores medioambientales intervinieron "para intentar comprobar el impacto en el medio acuático natural", explicó a la AFP Stéphane Charretier, jefe del servicio departamental de la OFB. Aunque los resultados sólo se conocerán “dentro de una semana”, los equipos de la OFB “hasta ahora no han observado ninguna mortalidad de peces”, añadió.
Las barreras flotantes, instaladas por los bomberos pocas horas después del vertido, tuvieron "a priori una eficacia bastante importante", afirmó, subrayando que este tipo de vertido sigue siendo "afortunadamente, un fenómeno bastante raro". Según la prefectura, la fiscalía ha abierto una investigación llevada a cabo conjuntamente por la gendarmería y la OFB.