Un exasesor económico y estrecho aliado del expresidente estadounidense Donald Trump, Peter Navarro, fue declarado culpable el jueves de obstruir los poderes de investigación del Congreso que lo había citado para conocer del asalto al Capitolio el 6 de enero de 2021.
Otro exasesor de Donald Trump, Steve Bannon, heraldo del populismo de derecha, ya había sido condenado por los mismos delitos a cuatro meses de prisión en 2022, pero apeló. El juez Amit Mehta fijó la fecha de sentencia para Peter Navarro para el 12 de enero de 2024.
Peter Navarro fue declarado culpable de los cargos de negarse en 2022 a comparecer y proporcionar documentos al comité de la Cámara que investiga los hechos del 6 de enero de 2021. Ese día, cientos de partidarios de Donald Trump irrumpieron en el Capitolio, sede del Congreso estadounidense, en un intento de impedir la certificación de la victoria de su oponente Joe Biden.
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Nada más abandonar el tribunal, Peter Navarro anunció su intención de apelar argumentando que un “alto asesor de la Casa Blanca no podría ser obligado a testificar ante el Congreso”, so pena de violar la “separación de poderes” ejecutivo y legislativo. Se enfrenta a entre 30 días y un año de prisión, así como a una multa de hasta 100.000 dólares por cada uno de los dos cargos.
La comisión de investigación del 6 de enero de 2021 recomendó en su informe publicado en diciembre de 2022, después de 18 meses de trabajo, iniciar un proceso penal contra Donald Trump, en particular por llamado a la rebelión y conspiración contra las instituciones estadounidenses. El expresidente republicano fue acusado en agosto por un tribunal federal de Washington y luego por los tribunales del estado de Georgia (sureste) por sus intentos supuestamente ilícitos de obtener la revocación de los resultados de las elecciones de 2020.
